martes, 28 de julio de 2009

¿Que hace un cristiano desempleado?

En hoy dia el desempleo toca las puertas de cristianos y no cristiano
nuestro amigo luis palau nos da los siguientes consejos.

Cada vez que aparece el desempleo, crea problemas matrimoniales, financieros y hasta médicos. Además expone de manera prematura a los peligros que por lo general se asocian con la mediana edad: el cansancio, el descuido y la confusión. Estos mismos términos describen a muchos de los desempleados hoy.


¿Qué debe hacer un cristiano consagrado si se encuentra sin trabajo? Creo que la Biblia nos da varios principios específicos que tienen que ver con el tema del desempleo.


En primer lugar, acepte su situación, por más difícil que sea, y confíe en que Dios obrará para bien. La Biblia promete que "a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados" (Romanos 8:28).


En segundo lugar, planee cuidadosamente cómo usar el tiempo extra de la mejor manera posible. En Efesios 5:15-16 leemos: "Así que cuidado cómo viven ustedes. Sean sabios, no ignorantes; aprovechen bien el tiempo" (BD).
Si usted es un cristiano desempleado, le sugiero que pase las primeras dos horas de cada día estudiando la Biblia y orando. Luego pase las siguientes tres o cuatro horas buscando trabajo.


En tercer lugar, ministre a otros durante su tiempo libre. Organice un estudio bíblico con otros que tal vez también están desempleados, y oren juntos. Pase tiempo discipulando a nuevos creyentes.
En forma individual o grupal, ofrézcase como voluntario para trabajar con su iglesia, ayudando a los necesitados, visitando a los ancianos o evangelizando a su comunidad en forma activa.
La Palabra de Dios nos dice: "No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos" (Gálatas 6:9).


En cuarto lugar, sea un buen administrador de su tiempo, energía y posesiones. Con su familia piense cómo puede usar creativamente lo que ya tiene a fin de suplir sus necesidades y aun ayudar a otros.
Tal vez tenga un terreno. Plante una huerta. Quizás tenga talentos que podrían ser usados para ganar algo de dinero. Utilícelos.
En Mateo 6:33 leemos: "Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas". Si honramos a Dios en cada aspecto de nuestra vida, podemos estar seguros de que El suplirá todas nuestras necesidades.


Si el desempleo golpea a su puerta, lo desafío a buscar el reino de Dios y su justicia. Actúe según los principios enunciados más arriba y confíe en que Dios proveerá lo que usted necesita.
Si el desempleo no es su problema específico pero conoce a quienes están luchando con esta cuestión, comparta con ellos estos consejos bíblicos y anímelos a seguir adelante en el Señor.


lunes, 13 de julio de 2009

Santidad en el noviazgo


Si te han dicho esto no quiere lo mejor para ti

Si me amas, vas a hacer el amor conmigo.
Si yo te importo, tendrás relaciones sexuales conmigo.
Si no quieres tener relaciones sexuales conmigo, entonces no quiero verte más.
¿No te gustaría saber cómo es?


Numerosos estudios a lo largo de los años han demostrado que las personas que tienes relaciones sexuales antes de casarse tienen más tendencia a divorciarse


(1 Cor 6:18) "Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca". (Hb 13:4) "Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios". (1 Ts 4:3) "Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación". (2 Salmos 11-12) Es un ejemplo del juicio de Dios por el pecado de adulterio de David y Betsabé.


Las relaciones prematrimoniales acaban rompiendo nuestra relación espiritual con Dios.
Los mandamientos bíblicos en cuanto al sexo no son arbitrarios ni caprichosos, sino que reflejan a la perfección la naturaleza y las necesidades del hombre, y la forma en que Dios pretende que el sexo supla esas necesidades. Por eso, cuando defendemos la castidad preconyugal no lo hacemos, entiéndase bien, por amor a la castidad, sino por amor al matrimonio. Así como debe haber una fidelidad en el matrimonio, debe haber igualmente una fidelidad antes del matrimonio, simplemente porque sabemos que la espera de aquel con quien vamos a compartirlo todo es enriquecedora.

Dios conoce y quiere lo mejor para nosotros. El sabe cómo funciona el espíritu, la mente y el cuerpo humano, y en qué forma se disfrutan más las relaciones humanas; por lo tanto, cuando El dice que el sexo sólo pertenece al lecho matrimonial, no está restringiendo nuestro disfrute; sino que nos está mostrando la forma de disfrutarlo mejor. Dios no está tratando de evitar que tengamos una vida sexual maravillosa; sino que está dándonos una directiva positiva de cómo podemos tener la mejor vida sexual posible.

Sin santidad nadie vera al señor
Aprendamos a rechazar las tentaciones para poder obtener la corona de la vida